jueves, 15 de octubre de 2009

Las primeras castañas

Ayer me comí mis primeras castañas del año (cabe decir que para mí los años siguen siendo los escolares, de septiembre a agosto).
No es que luego suela comer muchas más veces castañas (a menos que me pille el puesto a mano o en mi ruta y se me antojen) pero ayer no me pude resistir.
Salí del metro y allí estaba en puesto, la castañera, el olor a castañitas recién hechas... asi que fue inevitable que me dedicara a hacer equilibrios con el bolso, la bolsa de la comida (venía del curro a las 7 y pico de la tarde, así que sumemos al puesto, la castañera y el olor de las castañas el hecho de que tenía más hambre que magila el gorila), la chaqueta, el movil con el que etsaba hablando con una amiga, la cartera...
Pero lo conseguí sin romper ni matar a nadie, me llevé mi bolsita de castañas recien hechas y mmmmm, me supieron a gloria. Además, las primeras castañas me recuerdan que las navidades ya están cerca. ¿A vosotros que os lo recuerda?

3 comentarios:

  1. A mí las castañas me recuerdan a los castaños. A rozar el monte para cogerlas, es lo que tiene ser rural.

    Tienes que probarlas con leche. Mejor cocidas, pero asadas valen también. Bocati di cardinale

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  2. Mmmm, castañas, me encantan, asadas y crudas!!!

    Lo mejor es comprar un cartucho en pleno invierno y calentarte las manitas con ellas...

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  3. Adoro las castañas, una pena que me sienten tan mal...aún así, de vez en cuando cometo el pecadito y ¡qué me quiten lo bailado!...yo hice el otoño pasado un flan de castañas con salsa de caqui y mango...pa chuparse los dedos :)

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